Las geomallas Tridimensionales han demostrado su desempeño y rentabilidad en miles de aplicaciones.
En suelos blandos, mejoran la capacidad portante efectiva del suelo mediante la distribución de cargas aplicadas con mayor eficacia, de manera similar a un zapato de nieve que sostiene el peso de un hombre sobre la nieve blanda.
Las geomallas Tridimensionales entrelazan y dan rigidez a los materiales de relleno mediante el confinamiento de partículas granulares en las aperturas triangulares, lo que da como resultado un componente más fuerte que brinda mayor capacidad de servicio y duración.
Las geomallas Tridimensionales se utilizan para minimizar los requisitos de relleno agregado, reducir o eliminar la sobre excavación, mejora la compactación, disponer de una plataforma de construcción y prolongas la vida útil.